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martes, junio 22, 2004


Music by: Pulp [Bar Italia]

Nunca he sido muy cercano a mi padre. Me ha querido, y no le pido nada. Au contrarie.
Mi padre es un hombre seco, inescrutable. Nunca me dejó verle un dolor o una lágrima. Ni siquiera una alegría. Y yo no le dejé ver las mías.
A veces las cosas que aprendes no son las que te enseñan. Son la única manera posible.
Luego te vuelves viejo y te lo cuestionas todo. ¿Por qué tu madre no fué perfecta? ¿Por que no pudiste hacer de tu hermano un amigo?
A veces son éstas recriminaciones las que te van consumiendo poco a poco. Y otras veces, desearías no haber nacido en primer lugar.

La última vez que ví a Isabel vestía una blusa negra que mostraba muy bien la forma redonda de sus senos, y una falda roja con ensortijados motivos negros a los costados cuyo dobladillo le llegaba hasta abajo de la rodilla. Sus pantorrillas fuertes y anchas terminaban en unos diminutos zapatos negros de 5 lazos. Su piel morena se miraba clara bajo la luz blanca de la *********. Se había planchado el cabello revuelto y éste le hacía un delicioso marco a su rostro redondo. No llevaba maquillaje. Nunca llevó maquillaje, sólo esa cara limpia que me hacía pensar en las niñas del colegio cuando hacen los honores a la bandera.
Me miró y parpadeó un par de veces. Luego me dió la espalda. Y mientras miraba caer con gracia su cabello y el punto de sus enormes nalgas en el que empezaban a salir los surcos de la falda, me dí cuenta de la ineludible y desastroza realidad:
La había perdido para siempre.


cn

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