Te quiero mucho Te oigo decir por las noches, como te oigo sollozar, como te oigo gemir, como te siento jalarme la sábana para que me meta en tus sueños y no en tus calzones.
Y luego alguien lloró. Tuve que salir, a jugar a que podía vivir para siempre, y lo único en que podía pensar era en Te quiero mucho.
Yo voy a vivir por siempre.
Por lo menos hoy.